martes, 7 de febrero de 2012

Dios es realción gratuita.

Buenas:
En la búsqueda de Dios, muchas veces queremos tener claro los conceptos y tenerlo muy bien definido. Tarea muchas veces, o siempre, difícil de definir.
A mi me gusta, y creo que tiene que ser así: a Dios se le conoce y se llega a él relacionándose. No son los conceptos lo que nos da seguridad, es la experiencia que se vive en esa relación.
Al pensar en la relación me viene a la cabeza la problemática que tenían dos alumnas de clase. Dos alumnas que experimenta una fuerte soledad y además  se echan en cara de que no es buena amiga.  Al oír esas palabras la otra  revive su experiencia de haber estado sala durante dos años sin jugar con nadie. 
Al escuchar sus palabras y  percibir como una no le había quitado ojo en todo el recreo . Comentaba todo detalle. Te quitaste el abrigo, te lo pusiste, fuiste aquí, luego allí. Y todo para fastidiar...
Nuestras relaciones ¿son de posesión, de hacer con el otro lo que queremos.? ¿O son relaciones gratuitas que saber respetar los ritmos, que saber respetar los gustos, las preferencias?
El Dios con el que me relaciono, me enseña en primera lugar, que lo que me da es gratuito. Lo puedo coger o no. Me puedo relacionar o no. No me exige nada, me respeta. Pero su mirada siempre me acompaña y es una mirada de amor.
Esto me hace pensar en mis relaciones con los demás. Creo, aunque se que me cuesta que intento no exigir, respeto... y sobre todo no echar en cara.  ¿cuánto daño  hacemos con nuestras palabras?  ¿cuántas veces buscamos el mal del otro?
Dios quiere nuestro bien y nos respecta. Se relaciona con nosotros desde la gratuidad. Nos ofrece la felicidad y una felicidad plena.
 
Jesús ayúdame a saber mirar y ver la realidad como tú la ves. En los encuentros contigo ayúdame a experimentar que tu me miras con amor.